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Presidencia

La rentabilidad, primera línea de defensa ante los retos globales

Alejandra  Kindelán EnTrevista KPMG

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El 2023 ha sido un buen año para el sector y eso tiene un impacto positivo en los países y las economías donde operamos porque el impulso al crecimiento económico, que está en nuestro ADN, es el impulso al progreso social. Se mantiene la recuperación de la rentabilidad por la mejora económica y la normalización de la política monetaria, la morosidad continúa controlada y las ratios de capital y de liquidez cuentan con un margen relevante sobre los requerimientos regulatorios.

Las entidades AEB están en condiciones de aportar seguridad y fortaleza en un entorno aún incierto, con importantes riesgos geopolíticos, débil crecimiento económico en el conjunto de la Eurozona y una previsible bajada de los tipos de interés a lo largo del año.

La rentabilidad es la primera línea de defensa, la que nos permite hacer frente a los retos de un mundo en constante cambio, liderar la transformación verde y digital, financiar las inversiones que la Unión Europea tiene que acometer y mantener nuestros compromisos con la sociedad.

Nuestra fortaleza es nuestro modelo de negocio, diversificado, comercial e innovador. Este año los préstamos de las entidades AEB han llegado a los 1,72 billones de euros a nivel global y, solo en España, 325.000 millones destinados al acceso a la vivienda u otras necesidades de las familias, y 251.000 millones para financiarL proyectos empresariales. Con este crédito se desarrollan las inversiones que impulsan la productividad, el crecimiento y la creación de empleo, uno de los mayores factores de estabilidad económica y social.

Además, hacemos la vida más fácil a nuestros clientes, a través de la segunda red de oficinas bancarias más densa de la zona euro.

Miramos al futuro con un decidido impulso al crecimiento sostenible con más de 108.000 millones de financiación verde y el impulso de la transformación digital, de la que ya son parte el 78% de nuestros clientes. Bizum, la plataforma de pagos directos digitales más exitosa de Europa, está a punto de llegar a los 26 millones de usuarios. La expresión «hacer un Bizum» se ha convertido en algo habitual, y este año amplía su alcance con el pago de tasas e impuestos de algunas administraciones.

Creemos que una buena herramienta para seguir dando respuesta a las necesidades de la sociedad es la colaboración público-privada. Tanto para operaciones de intermediación de los ciudadanos con la administración pública —como el pago de impuestos, pensiones, tasas etc.—a través de más de 682 millones de transacciones por un importe superior al billón de euros, como para llevar a cabo la distribución de recursos públicos. Tras las líneas ICO-COVID que fueron un caso de éxito, se ha solicitado nuestra colaboración para la distribución de los fondos europeos Next Generation.

La solidez financiera, anclada en la mejora de la rentabilidad, es el punto de partida sobre el que se sustenta toda esta actividad.

Los bancos de la AEB han mantenido durante el pasado ejercicio una rentabilidad superior a la media de la zona euro, con un ROE del 12,6%, impulsado por el margen de intereses, y una ratio de eficiencia por debajo del 45%.

Los resultados del sector en 2023 —23.000 millones de euros para los bancos AEB— son la mejor garantía para afrontar el futuro y nuestros compromisos: cumplir holgadamente con el capital para seguir concediendo crédito con el que generar más inversión, más empleo y por tanto más crecimiento; remunerar con dividendos a los más de 5 millones de accionistas, la inmensa mayoría minoristas, y reforzar nuestra contribución al estado del bienestar con el pago de impuestos. El sector está a la cabeza de los países europeos en tributación, el año pasado solo el gasto en Impuesto de sociedades y el gravamen temporal de los bancos de la AEB supuso 10.300 millones de euros.

Con estos recursos contribuimos a afrontar retos del país como son el envejecimiento, la despoblación o el impulso a la Educación financiera y la capacitación digital.

A lo largo del último año prácticamente se ha completado el proceso de inclusión en la España rural. El 93% de los municipios de más de 500 habitantes sin punto físico de acceso a finales del año 2021, tienen o está previsto que tengan una solución presencial como cajero automático, oficina, OfiBus, etc., lo que supone la inclusión financiera de 200.000 personas. Para los municipios más pequeños, la mayor parte del sector ha firmado el acuerdo con Correos Cash entre otras soluciones para facilitar el acceso al efectivo.

También avanzamos la mejora de la atención presencial a las personas mayores con la ampliación de los horarios de caja, de la que ya se han beneficiado más de 6,5 millones de personas, o la atención telefónica personalizada de la que han disfrutado más de 2,5 millones. Los esfuerzos dan resultado, una reciente encuesta independiente destaca la mejora de la percepción de los servicios bancarios en el último año. Existe un alto grado de satisfacción con los canales de comunicación, del 92% en el caso del canal online y en porcentajes cercanos al 80% en oficina, cajero automático y gestor personal. Se amplía el conocimiento de las medidas impulsadas por los bancos y el 88% se siente autónomo y seguro a la hora de operar, 20 puntos más que en 2022.

Hay margen de mejora, a los esfuerzos de las entidades la AEB suma cursos y talleres de capacitación digital, con socios como Cruz Roja, Fundación Telefónica y la ONCE con quien colaboramos en el programa Unidiversidad en el que voluntarios de la AEB imparten formación financiera a personas con discapacidad. Ya están en todos los centros de formación de Somos Digital, en toda nuestra geografía, los simuladores de apps y webs bancarias con los que ampliaremos el impacto de nuestros esfuerzos, que el año pasado llegaron a más de 250.000 alumnos con una participación muy activa de empleados de banca, más de 1.500 voluntarios. En materia de Educación Financiera, este año celebramos el X aniversario del programa en los institutos que ya se ha convertido en una referencia, «Tus finanzas, tu futuro», y que ha contado en esta edición además con la participación de CEOs de entidades AEB como muestra redoblada del compromiso de todos.

Por lo que respecta a la sostenibilidad, el sector bancario juega un papel esencial para que la economía española alcance los objetivos de la transición energética. En concreto, una buena parte del volumen de financiación concedido en 2023 ha ido destinado a aumentar la capacidad de nuestro país en energías renovables y a incrementar los niveles de eficiencia energética, lo que debe ser un catalizador para atraer inversión extranjera y aumentar la competitividad del tejido productivo español.

A través de FINRESP, el Centro Español de Finanzas Responsables y Sostenibles, el sector financiero llama a la acción conjunta de todos los agentes económicos para el desarrollo del Libro Verde de las finanzas sostenibles.

Asimismo, el sector se está preparando y haciendo las inversiones necesarias para mantenerse a la vanguardia de la digitalización en cuestiones como la Inteligencia Artificial, analítica de datos, tokenización de criptoactivos, seguridad y siempre en cumplimiento con el nuevo mercado normativo.

En cuanto a la apuesta por el talento del futuro, CUNEF Universidad sigue ampliando y consolidando sus titulaciones nuevas y el nuevo campus. El Instituto Español de Banca y Finanzas viene desarrollando un papel destacado en dar a conocer la función de los bancos en la economía y en la sociedad con informes y foros de discusión sobre asuntos de actualidad como el Euro digital, soluciones de pago o estudios comparativos con la banca estadounidense.

Este año hemos multiplicado la actividad de AEB en los medios de comunicación. Al aumento de foros, encuentros, entrevistas y contacto habitual con la prensa, hemos añadido espacios divulgativos e informativos en las cuatro principales emisoras de radio. Una oportunidad para dar a conocer el papel del sector, sus iniciativas de apoyo a la economía y a la sociedad, y luchar contra estereotipos y prejuicios. En los últimos meses hemos reforzado los mensajes en materia de ciberseguridad, una cuestión que consideramos prioritaria y de «seguridad nacional», y en la que estamos y estaremos volcados con la puesta en marcha de una gran campaña sectorial que cuenta con el respaldo de Guardia Civil, Policía, e INCIBE, entre otros.

En cuanto al futuro más inmediato, miramos a la UE y al nuevo ciclo político y social que se abre con las elecciones de junio. Se están ultimando los informes de Enrico Letta sobre mercado único y de Mario Draghi sobre competitividad, después de la presentación del documento de «Autonomía Estratégica Abierta» aprobado durante la presidencia española. Son documentos que componen una hoja de ruta para impulsar el crecimiento en la Unión, sobre la base de sus grandes fortalezas, y para seguir siendo una región de derechos y libertades líder en el mundo.

Es el momento de la ambición europea y el sector va a seguir jugando un papel fundamental —actualmente el 70% de la financiación en Europa es bancaria—Será necesario un mandato político decidido para una regulación bancaria equilibrada y eficaz con la que conseguir un nuevo impulso para que la UE alcance sus objetivos.

Para ello insistimos también en la necesidad de completar la Unión Bancaria con la puesta en marcha del Fondo Común de Garantía de Depósitos para romper el nexo entre deuda bancaria y soberana y reducir la fragmentación, lo que nos permitiría ganar resiliencia, confianza y capacidad competitiva frente a nuestros pares europeos y, muy especialmente estadounidenses.

Vivimos un tiempo de tensiones geopolíticas, con una política monetaria a punto de alcanzar un punto de inflexión y con unas necesidades estratégicas de competitividad y crecimiento en las que los bancos tenemos un papel esencial. Por eso no es el momento de limitar nuestras capacidades con medidas como la anunciada conversión a permanente del impuesto al sector en España. Ser el único país europeo con una carga así supone una enorme desventaja competitiva y una limitación innecesaria para el desarrollo del negocio bancario tan necesario ante los retos que tenemos.

Contamos con las fortalezas para ser parte de la solución. Trabajemos para generar un marco equilibrado y seguro en el que el sector pueda desarrollar todo su potencial Porque hoy, nuestra rentabilidad es seguridad, crecimiento y progreso.

Accede a la carta de Alejandra Kindelán en este enlace.